Refiriéndonos a los modos de vestir. Se ha abandonado el sentido del pudor en playas, piscinas, espectáculos, donde la desnudez casi total ha sido largamente afirmada, el impudor se extiende por todas las otras zonas de la vida ordinaria –espectáculos y publicidad, TV e internet, literatura y conversaciones.
El pudor está ordenado a favorecer la castidad. Difícil es que se mantenga firme la castidad donde reina el impudor en el vestir, en el hablar, en los espectáculos y medios de difusión.
La predicación insuficiente del Evangelio del pudor y de la castidad es la causa principal de la ausencia de estas virtudes en el mundo y en la Iglesia. La causa principal de éstos no es la maldad del mundo circundante, sino el silenciamiento de la doctrina cristiana sobre estas materias, e incluso una aceptación ideológica del impudor como si fuera un progreso de la conciencia moral de la humanidad moderna.
El pudor cristiano no se limita a no-escandalizar, sino que pretende expresar la santidad de Cristo en formas nuevas que iluminen la oscuridad del mundo con su bondad y su belleza. Los cristianos no hemos sido enviados por Cristo al mundo para no hacer males, sino para difundir y acrecentar en él toda clase de bienes.
Pidamos a la Virgen de Fátima en su centenario que nos ayude a vivir esta virtud. La Virgen de Fátima alertó de que los pecados contra esta virtud, eran los que más almas llevaban al infierno.
Ayudemos a entender a nuestras hijas, que la sacralidad de la misa exige vestir con pudor.
“Ideas recogidas del blog de D. José María Iraburu de infocatólica”
“Silenciamiento de la doctrina cristiana sobre estas materias”.
Pastores débiles que permiten celebraciones donde se olvida que se debe venir vestido con la dignidad que exige un lugar sagrado.
Vivimos en un mundo, donde la forma de vestir se valora más que la de pensar.
Me gustaMe gusta
Estoy de acuerdo con todo lo que está expuesto Que pena da ver a las personas con tan poco pudor delante del Sagrario
Me gustaMe gusta